En el marco del Día Mundial Contra la Trata de Personas, la vicepresidenta de la República, Dra. Karin Herrera presidió el acto de adhesión de las autoridades del Ministerio de Gobernación (MINGOB) a la campaña “Corazón Azul” contra la Trata de Personas liderada por la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) y coordinada por la Secretaría Contra la Violencia Sexual, Explotación y Trata de Personas (SVET).
La ceremonia, tuvo lugar en la sede del MINGOB donde se destacó el compromiso del Estado guatemalteco en la lucha integral contra la trata de personas, un flagelo global perpetrado por redes criminales transnacionales que afecta severamente a la población vulnerable en todo el mundo.
En sus palabras, la vicepresidenta Dra. Karin Herrera subrayó la importancia de unir esfuerzos entre las distintas instituciones gubernamentales para combatir este delito que vulnera los derechos fundamentales de las personas. "Es fundamental que todos nos comprometamos a prevenir y erradicar la trata de personas, protegiendo especialmente a niñas, niños y adolescentes, quienes son los más afectados por esta forma moderna de esclavitud", enfatizó.
Por su parte, el ministro de Gobernación expresó su entusiasmo por la incorporación del MINGOB a la campaña Corazón Azul, resaltando la necesidad urgente de fortalecer las acciones preventivas y punitivas. "La trata de personas es un crimen despreciable que genera miles de millones de dólares a costa del sufrimiento humano. Nos comprometemos a intensificar nuestras operaciones para desarticular las redes criminales y proteger a nuestras comunidades".
La campaña Corazón Azul, adoptada por Guatemala desde 2016 como una iniciativa estatal, busca concienciar, educar y movilizar a la sociedad para prevenir este delito y apoyar a las víctimas. A través de la firma y la imposición del distintivo del Corazón Azul, las autoridades del MINGOB reafirmaron su compromiso de trabajar en conjunto con otras instituciones y actores clave para enfrentar este desafío global.
En el marco de esta adhesión, se anunció la implementación de nuevas estrategias coordinadas entre diversas entidades estatales para aumentar la efectividad de las medidas contra la trata de personas, reforzando así el compromiso de Guatemala con los estándares internacionales de derechos humanos y la protección de los más vulnerables.
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